Conocida popularmente como Ardilla roja, es un habitante frecuente en nuestros pinares, aunque puede localizarse en otros tipos de árboles, como ésta de las fotografías que vigila atenta desde las ramas de un roble.
Es un mamífero roedor, esencialmente arborícola que se alimenta de semillas, frutos secos (piñones, bellotas, nueces, ayucos ...), complementando su dieta con yemas, brotes, hongos, moras, insectos o huevos de aves . Es fácil verla en los parques de las ciudades donde se aclimata a vivir rodeada de gente, aceptando de buen grado cualquier golosina que se les proporcione.
Crían 2 veces al año con un promedio de 3 cachorros. Generalmente viven de 4 a 6 años, siendo frecuente la mortalidad en el primer invierno de vida, sobre todo si hay escasez de semillas ese año. Miden unos 50 centímetros (la mitad es su característica cola peluda) y no llegan al medio kilogramo de peso. Los pinceles o mechones de pelo de sus orejas, suelen desaparecer en verano. Hay unas 20 subespecies aceptadas. Aunque hay distintas opiniones, en la Península se encontrarían 6 de ellas: S. alpinus, S. infuscatus, S. numantinus, S. baeticus, S. rufus y S. hoffmani. Algunos de sus depredadores son el gato silvestre, la garduña, la marta o la gineta, así como rapaces diurnas y nocturnas.
Las fotografías son de mediados de mayo, en una ladera con robles de la Sierra Norte de Guadalajara, cerca de la margen del Jarama, donde la encontré mientras hacía fotografías de orquídeas silvestres.
Estas otras son de otro ejemplar en un pinar de la ribera del Río Cuervo, Serranía de Cuenca. en el mes de junio, cerca de una zona de descanso, donde se acercan a buscar restos de comida dejados por los excursionistas.
Ref.: wikipedia.org, faunaiberica.org, sierradebaza.org
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